domingo, 28 de febrero de 2016

No es tan facíl terminar un capítulo

Las decepciones forman parte de la vida.
Estoy harta de confiar en gente que no merece la pena, que te engañan, o que ponen en duda tus palabras.
Que se reíen de ti o incluso de la gente que estafa.
Sabeis el dinero no trae la felicidad, si ayuda bastante. Con el dinero puedes tener una casa, un buen coche o un buen movil, pero hay cosas que el dinero no te da.
Cada día me repugnan más la gente que lo hace todo por dinero.
Cada día estoy más harta de sentir odio. No me gusta.
Cerrar capítulos de tu vida cuesta y al menos para mí cuesta bastante.
No se puede negar que dejan bastate huella.
La actitud te cambia, la desconfianza crece.
A veces pienso que amás podré quitarme estas huellas que me han dejado tan marcada.
Y que hay recuerdos que no quieren irse.
Las burlas, las humillaciones.
Pienso que tengo que dejar de ser humana, y convertir me en un ser frío que ni sienta ni que padezca.
Pero no, soy ser humana, y como tal siento, y si veo a alguien que tiene problemas le trato de ayudar, sinceramente porque todos es esta vida, algún día necesitaremos esa ayuda.
¿De que sirve ser una persona fría?
¿Enserio, sirve para algo?
¿De que sirve ser una persona avariciosa?
La avaricia solo trae infelicidad.
Es cierto que a veces no nos conformamos con lo que tenemos, pero tenemos que aprender hacerlo.
Y sobre todo dejar de comprarnos con otros.
Que más que fulanito tenga tal y yo no lo tenga.
Es increible pero a mi a veces me sale eso.
He aprendido en esta vida a ganarme las cosas a base de esfuerzos.
He tenido mis piedras en el camino y me alegro que estuviesen porque si no no hubiera aprendido a lavantarme.
Y lo que me ha pasado está vez me lo tengo merecido por no escuchar a mi madre.
Porque al final de cuentas tenía razón.
Escuchar siempre a una madre, porque de verdad, te evitarán muchos problemas.

A veces el mayor obstáculo es decir
No puedo.